Hamburguesas de brócoli y truco de aprovechamiento

Si eres de los que sueles leer este blog, a estas alturas ya te habrás dado cuenta de tres cosas: 

1- que me gusta preparar diferentes versiones con un mismo producto,(especialmente verduras) para conseguir que se coman fácilmente y disfrutando lo más posible

2 - que me encantan especialmente las recetas rápidas, que nos pueden solucionar un buen plato en un momento, pero sin perder calidad.

3 - que uno de mis lemas es "aquí no se tira nada"

Y una vez aclarado esto, os voy a presentar un plato de lujo apta para todo tipo de públicos, incluso para aquellos que no son muy amigos del verde jeje.

Lee bien la receta antes de prepararla, merece la pena para que no tengas luego problemas a la hora de elaborarla.

Preparación: 20 minutos

Ingredientes para 4 personas (o para 2 y guardando para otro día la mitad de lo preparado)

2 ramilletes de brócoli medianos

1 cebolleta fresca

sal y pimienta negra molida

2 cucharadas de pan rallado

2 huevos

2 cucharadas de queso parmesano rallado

aceite de oliva virgen extra

Para la ensalada:

unos arándanos  secos

aceite y sal

• Con esta foto igual te puedes ir haciendo la idea de cuál es el truco. Sino es así, luego te cuento de que va.
• Corta las flores de bròcoli con un poquito de su tronco y ponlo en un bol. Echa un chorrito de agua, unas 2 o 3 cucharadas y tapa con film transparente. Reserva los troncos, ni se te ocurra tirarlos que te estoy viendo.

• Mete en el microondas y cocina a máxima potencia durante 8 minutos.

• Mientra pica la cebolleta y sofríe a fuego lento en una sartén con una o dos cucharadas de aceite de oliva virgen.

• Ahora que tienes en marcha el brócoli y la cebolleta, con cuidado y con un buen cuchillo, pela el tronco que has reservado y una vez bien limpio, corta en rodajas finas y coloca en un plato.
• Añade un puñado de arándanos secos y aliña con un poco de sal y aceite de oliva virgen. No vayas a pensar que te estoy diciendo algo raro por proponerte que comas el tronco, crudo, del brócoli. Te aseguro que te va a sorprender, no es nada fuerte, al contrario tiene un sabor suave y una textura crujiente fascinante.

• Bueno ya tenemos la ensalada y ahora atiende a la cebolla, no se te vaya a quemar. 
• Ya tendrás el brócoli tierno. Ten cuidado al quitar el film, tendrá vapor muy caliente y te puedes quemar.
• Picotea con ayuda de un cuchillo y un tenedor para dejarlo en trozos pequeños.

• Añade los huevos, la sal, la pimienta negra al gusto, el pan rallado, el queso rallado y la cebolla que ya la tendrás pochada.

• Remueve y mezcla bien, deja reposar un par de minutos para saber si te va a hacer falta un poco más de pan. Mira la texturas que tiene.

• En la misma sartén que has hecho la cebolla pon una cucharadita de aceite y vete friendo cucharadas grandes de esta mezcla.
• Una vez que las pongas en el sartén dales un poco de forma con ayuda de una espátula y aplasta ligeramente para que cojan forma de hamburguesa. No te preocupes no hace falta que pasen por un control hamburguesero de lujo, son caseras y como tales, no serán todas iguales ni perfectas.

• Cuando estén doradas por un lado da la vuelta y dora por el otro lado. No pongas el fuego muy alto, se te tostarán demasiado rápido. Del 1 al 11 que tengo en la cocina de inducción yo lo pongo al 7.
• Sirve calientes con la ensalada y si te gusta darles un toque picante le puedes poner una pizca de tabasco. También se pueden acompañar con una salsa de yogur  con un poco de sriracha o de mostaza, o cualquier otra que te apetezca, pero que sea ligera para no ocultar el sabor delicado de estás hamburguesas.
  

No te las pierdas, están super ricas, en casa han pasado el filtro más exigente, y si aquí han superado la prueba seguro que en tu casa también. Si te animas y te gustan dejame un comentario.