Tacos de pollo caseros
¿Queda un poco pero no lo suficiente para que te solucione la cena? Pues una solución perfecta es preparar unos tacos. Le añades un poco de tomate de lechuga o espinacas, algo de cebolla y aguacate, un poco de tabasco y perfecto.
Pero no siempre tenemos tortillas de maíz o de trigo para rellenar, así que hoy os traigo una receta estupenda para preparar unas tortillas en casa.
Solo hay un ingrediente que debe tener en tu despensa, porque a partir de ahora la vas a utilizar más de lo que crees. Ese ingrediente es la harina de maíz precocida, la marca más fácil de encontrar en PAN, la verás en muchos supermercados.
No solo sirve para preparar estos tacos, también para hacer arepas, que son perfectas para solucionar la falta de pan en cualquier momento, ya que se hacen rápido y en una sartén.
Preparación: 30 minutos y 30 más de reposo
Ingredientes para 6 o 7 tortillas:
4 cucharadas de harina de maiz precocido
4 cucharadas de harina de trigo
3 cucharadas de aceite de oliva virgen
un poco de sal
1/2 vaso de agua aproximadamente
Relleno:
esto queda a tu gusto o a lo que tengas disponible en el frigorífico, por ejemplo:
pollo u otra carne asada (en la foto puedes ver uno de pollo y otro de cordero)
lechuga o espinacas troceadas
tomate troceado
aguacate troceado
cebolleta fresca
tabasco (si te gusta el picante) u otra salsa a tu gusto
- Mezcla las harinas con el aceite, la sal y echa la mayor parte del agua. Mezcla para ir uniendo estos ingredientes, y vete añadiendo el agua que necesites hasta conseguir hacer una bola de masa consistente.
- Deja reposar durante 30 minutos cubierto con papel film, en el refrigerador.
- Pasado este tiempo coge porciones de masa y forma una bola, como del tamaño de un albaricoque.
- Coloca la bola entre dos papeles de hornear y aplastala con todas las ganas con la base de una cazuela.
- Esmérate en el aplastamiento que de ello depende el grosor de la tortilla, aunque ya te aviso que no te van a quedar tan finas como las que venden con este sistema, pero si lo suficiente como para que sean ricas y flexibles.
- Coloca una sartén al fuego medio, sin aceite ni nada.
- Vete cocinando las tortillas y dándoles la vuelta para que se hagan por ambos lados. A mi me gusta tapar la sartén para que con el calor y el vapor que se genera se hagan también por dentro. Tendrás que controlar el fuego para que se hagan sin quemarse. La primera será de prueba, las demás te saldrán perfectas.
- A medida que vayas sacándolas colocalas en un plato envueltas en un paño de algodón, hasta la hora de servir, así se conservarán calientes y tiernas.
- Ahora ya solo queda rellenar con lo que tengas a mano, un cama de espinaca, un poco de tomate y cebolleta para aportarle jugosidad y frescura y la carne del asado que tengas para darle consistencia. Y si tienes un poco de guacamole a mano, quedarán de locura.
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