Magdalenas de nata

No os podéis ni imaginar la esponjosidad de estas magdalenas. Se podría esperar que al llevar nata fuesen más densas y pesadas, pero son extremadamente livianas.

Una auténtica maravilla para deleitarnos por la mañana acompañadas de un buen café con leche y cargar las pilas para ponerse a trabajar.

El truco simplemente es batir los huevos con el azúcar hasta que queden casi montados y blanquecinos. 

Preparación: 10 minutos y 20 de horno

Ingredientes para 12 magdalenas grandotas
235 gr de nata de leche (si no dispones de ella y vas a utilizar nata para montar mira la nota final)
250 gr harina
235 gr azúcar
1 sobre de levadura química (16 gr)
4 huevos medianos
1 chorro de aceite de oliva virgen (3 o 4 cucharadas)
la ralladura de un limón (bien lavado ¿eh?) opcional
Azúcar perlado para decorar (opcional)

• Calienta el horno a 230º.
• Bate los huevos con una pizca de sal, la ralladura de limón  y el azúcar con una batidora de varillas, hasta que estén completamente blanquecinos y super aireados. Tardará alrededor de unos 7 u 8 minutos.
• Añade la nata y el chorro de aceite y sigue batiendo un minuto más.
• Baja la velocidad y añade la harina una vez tamizada con la levadura. Si la batidora no tiene una velocidad muy baja, apágala y mezcla la harina a mano con una espátula suavemente, para que todo el trabajo que has hecho antes con los huevos no se eche a perder.
• Deja la masa al menos 30 minutos en el frigorífico.
• Pon la mezcla en una manga pastelera y rellena los moldes hasta un par de centímetros por debajo del borde.
• Introduce en el horno y bájalo a 210º. Tenlo así durante los primeros 10 minutos y luego bájalo a 190º durante otros 8 o 10 minutos más.
• Saca y deja enfriar sobre una rejilla.

Nota: Para que crezcan bien es importante colocar los papeles dentro de algún molde metálico, bien uno múltiple de muffins o si no tenéis, en flaneras individuales. De esta manera la crema crecerá hacia arriba y no hacia los lados.
Nota:  Guardadas dentro de una bolsa de plástico como las que se usan para congelación aguantan estupendamente 2 y 3 días, si no os las coméis antes. 

Venga al horno y a triunfar!!
Nota final: Si no tienes la suerte de disponer de nata de leche, de la de verdad, se pueden preparar con nata líquida para montar. Lo único es que hay que variar un poco las cantidades. Te hará falta un brick de nata de 200 ml y  200 gr de azúcar. El resto de ingredientes no varían.