Croquetas de pollo y espinacas

Si después de ver esta foto no te entran ganas de ir corriendo a la cocina a preparar croquetas, una de dos, o no tienes ni pizca de hambre o no tienes corazón :D

Ya son varias las recetas que he ido poniendo de croquetas. Que son un invento culinario perfecto para aprovechar cualquier resto que tengas en la nevera, y convertirlo en un pequeño y sabroso bocado.

Todavía hoy es el día que no he probado una croqueta casera que no me haya gustado, sea de lo que sea, pero eso si, tiene que ser casera.

Estas son el resultado de un resto de pollo asado, que quedó en casa, y que se ha transformado en una cena estupenda.
Y ahora que vienen las fiestas, siempre quedan restos de pollo o pavo asado, dando vueltas por la nevera, porque todos estamos un poco saturados de comida.
Prepara con esos restos unas croquetas y las congelas, tendrás resuelta la cena o el aperitivo de varios días durante el mes que viene.

Preparación: 1 hora mas tiempo de enfriado 

Ingredientes: 
pollo asado (1 muslo y 1/4 de pechuga que había sobrado)
90 gr de harina ( yo no la peso, pongo dos cucharadas soperas bien llenas con copete, lo digo por si no tenéis báscula)
5 cucharadas de aceite de oliva virgen
1/2 litro de leche y el jugo del asado juntos
1 puñado de espinacas frescas troceadas
sal y pimienta molida
para rebozar
2 huevos
pan rallado abundante

• Limpia de huesos el pollo y pícalo. Si en el asado tenias algún trozo de cebolla que también sobró, pícalo junto con el pollo.
• Trocea las espinacas lo mejor que puedas pero sin hacerlas papilla.

• Coloca un cazo al fuego con el aceite y cuando esté caliente echa la harina. Remueve y deja que se dore ligeramente.
• Agrega poco a poco la leche y bate con unas varillas enérgicamente, para que no se formen grumos.
• Una vez que has puesto toda la leche si ves que no consigues deshacerte de algún grumo impertinente, pasa la batidora, no es que esta sea la mejor opción, pero es mejor que hacer una crema con grumos. A medida que le cojas el truco a la bechamel dejará de hacerte falta.
• Mantén el fuego suave y vete dando vueltas con las varillas hasta que la masa empiece a espesar. 
• Si cuando espesa te cuesta remover con las varilla utiliza un tenedor o cuchara de madera.
• La crema debe hervir. Cuando esto ocurra añade el pollo y las espinacas y un poco de sal y pimienta negra.
• Deja cocer durante  10 minutos aproximadamente, para que la crema coja textura espesa.
• Una vez hecho esto vuelca la masa en una bandeja y extiéndela.

• Tapa la crema con papel film para que no se seque la parte superior y deja enfriar.
• Una vez fría podrás dar forma a las croquetas y pasarlas por huevo y pan rallado. En la receta de las croquetas de jamón tienes fotos explicativas si te interesa verlas.
• Ahora solo queda dejarlas un rato en el frigorífico antes de freírlas, para que la capa exterior se quede un poco firme y luego sean un bocado crujiente.
• Pon en una sartén honda o en un cazo pequeño abundante aceite de oliva virgen, cuando esté caliente ve friendo las croquetas en pequeñas tandas, para que el aceite no se enfríe en exceso.
• Dóralas por todos los lados y sácalas sobre papel de cocina para retirar el exceso de aceite que puedan tener.
• Sirve con una buena ensalada y a disfrutar.

¿Te animas?