Mezzelune rellenos de champiñones portobello


La pasta fresca recién hecha tiene un problema muy serio, una vez la pruebas ya no hay vuelta atrás, porque ningún otro plato de pasta va a estar nunca tan bueno como una pasta casera fresca. 
Si además es pasta rellena y el relleno está hecho con esmero y a tu gusto, estás totalmente perdido.
No todas las veces que como pasta en casa la hago yo, pero cuando tengo un ratillo el fin de semana y preparo pasta fresca rellena, ese día se convierte en fiesta y la comida en un festín.
Estas medias lunas rellenas de champiñones portobello y queso ricotta junto con una ensalada verde, son un banquete perfecto para un día festivo.
Yo la pasta la estiro a rodillo, pero si tienes una pequeña maquineta de hacer pasta te quedará perfecto. Y si no puedes estirar la pasta en pequeñas porciones con ayuda de un rodillo normal de cocina.
Preparación: 2,30 horas
Ingredientes para 4 personas:
Relleno:
400 gr de champiñones portobello (puede ser champi normal, pero el portobello tiene un sabor más intenso)
2 cebolletas con su parte verde incluida
200 gr de queso ricotta
4 cucharadas de queso Grana Padano rallado
aceite de oliva virgen extra
sal, pimienta negra molida, pizca de nuez moscada
125 ml de nata para cocinar o leche evaporada
1 cucharada de mantequilla
perejil fresco
Para la pasta:
300 gr de harina 00
3 huevos L
 
  • Lo primero que hay que preparar es el relleno, porque tiene que enfriarse antes de ponerlo sobre la masa.
  • Corta la cebolleta en cuadraditos pequeños (brunoise) y sofríe en una sartén con 3 cucharadas de aceite.
  • Mientras corta los champiñones también en el mismo tamaño (más o menos, tampoco hace falta que saques el metro)
  • Cuando la cebolleta esté pochada añade el champiñón y deja cocinar con un poco de sal y pimienta negra molida.

  • Cuando esté listo retira a un plato y deja enfriar.
  • Cuando se haya templado añade el queso ricotta y 2 cucharadas de Grana Padano y mezcla.
  • Prueba el punto de sal y pimienta y corrige si fuera necesario.
  • Pon todo el relleno en una manga pastelera y conserva en el frigorífico hasta la hora de usar.
  • Ahora vamos con la masa:
  • Pon sobre la encimera la harina en forma de volcán (lo ideal es hacerlo sobre una plancha de madera, pero no siempre es posible tener una a mano), dejando un puñadito aparte por si no nos hace falta, y en el centro del volcán casca los  huevos.  
  • Con ayuda de un tenedor bate los huevos y vete mezclando con la harina hasta que se haya incorporado parcialmente y puedas empezar a trabajar con las manos.
  • Una vez que tenemos bien mezclado, empezamos a amasar durante unos 10 minutos. La forma de saber que está lista es cortando la bola de masa a la mitad y si tiene un montón de agujerillos de aire es que está perfecta. Mira como la de la foto.

  • Cuando ya tengas la masa preparada, forma una bola con ella, enharinala por fuera y una vez envuelta en papel film, deja que repose, durante media hora.
  • Ahora viene el momento de estirar la masa, que suele ser lo más difícil cuando no se tiene mucha práctica y/o mucha herramienta.
  • Lo ideal es hacerlo con un rodillo largo y sobre madera. Pero hay opciones que no son las mejores pero resultan también útiles. Por ejemplo, si no tienes un rodillo largo puedes estirar porciones de masa mas pequeñas con el rodillo que tengas, o aún mejor estirar la masa con una maquinilla de pasta. No son nada caras y ocupan muy poco espacio. Tú elige la opción que se adapte mejor a tus necesidades.
  • Una vez que la masa está estirada en una capa fina, con ayuda de un cortador de unos 8 o 10 cm de diámetro corta círculos, aprovechando al máximo la placa de pasta.
  • Pon una porción de relleno en cada uno de los círculos y cierra como si fuera una empanadilla, cerrando bien los bordes con ayuda de un tenedor.

 

  • Pon a calentar agua abundante en una cazuela y cuando empiece a hervir echa 2 cucharadas de sal gruesa.
  • Cuece tus mezzelune en este agua. Tardarán unos 4 minutos aproximadamente.
  • Mientras en una sartén amplia, coloca una cucharada de mantequilla, cuando se derrita añade la nata junto con las otras dos cucharadas de grana padano, una pizca de nuez moscada, pimienta negra al gusto, sal y un poco del agua de cocción de la pasta.
  • Cuando tus mezzelune estén hecho sácalos del agua con ayuda de una espumadera y vete echándolos en la salsa.
  • Para decorar puedes reservar unos pocos champiñones y ponerlos a la plancha y hacer un poco de aceite con perejil triturado, con el que rociar los platos antes de llevar a la mesa.
  • Ah!! y por supuesto acompaña esta comida con una buena ensalada fresca de lo que más te apetezca, por ejemplo unas hojas de endivia con higos y nueces o avellanas y una vinagreta de mostaza, miel y aceite de oliva virgen. Si no tienes higos o no te gustan mucho, mira en tu frutero quizás tengas un rico melocotón o una pera para echarle.

Comentarios

Entradas populares