Ensalada de queso fresco y tomates marinados
Como todas las ensaladas, esta es de lo más sencillo, pero para que parezca que trabajamos algo, vamos a marinar los tomates y así darle un toque más especial.
Luego cuando la tomes fresquita te habrá merecido la pena.
La presentación queda muy bonita y es perfecta para disfrutar tanto solo como en buena compañía, ya que le dará un precioso colorido a tu mesa cuando tengas invitados.
Preparación: 20 minutos más el reposo
Ingredientes para 2 o 3 personas:
20 o 25 tomates cherry
1 queso fresco de los que vienen envasados para trocear o varios individuales
aceite de oliva virgen extra
sal y pimienta negra
1 ajo
tomillo, romero y orégano al gusto
- Pon un cazo con agua a hervir.
- Haz un pequeño corte a los tomates justo par cortar la piel.
- Cuando hierva apaga y mete dentro los tomates durante un minuto y retira a un bol con agua fría.
- La piel de los tomates ahora se retirará sin ningún trabajo.
- Cuando tengas todos pelados colócalos en un bol con el aceite las hierbas aromáticas, el ajo pelado y dado un golpetazo y la pimienta negra.
- Deja reposar durante unas horas, ideal si lo dejas de un día para otro.
- Cuando vayas a servir la ensalada corta el queso en discos, coloca los tomates alrededor, unas cuantas cucharadas del aceite de marinar por encima y un poco de sal, si es sal en escamas mejor que mejor.
- Acompaña con un buen pan, ya que no podrás resistir untar juguillo de esta ensalada.
Nota: el resto del aceite consérvalo, es ideal para aliñar cualquier otra ensalada que prepares o para saltear unas verduras o para freír cualquier carne.
Si no quieres entretenerte pelando los tomates (merece la pena de verdad), cortalos a la mitad y marina así.
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