Fideuá de chipirones



Me encanta la fideuá. Todavía recuerdo la primera vez que la comí. Fue en Valencia, hace un montón de años. Habíamos ido para celebrar la boda de una amiga que vive allí, y nos recomendó un restaurante donde las hacían buenísimas.
La verdad es que acertó de pleno, porque aquella estaba de fábula, y hoy es el día que todavía me acuerdo.

Luego han pasado muchos años sin volver a comerla, hasta que hace poco, otra amiga nos invito a su casa y preparo fideuá marinera .  Recordé lo que me gusta este plato tan típico de Valencia. 
Y ahora que se la he visto preparar a ella, me toca hacerlo a mí, y seguir disfrutando de esta delicia.
Preparación: 30 minutos
Ingredientes para 4 tragones:
500 gr de fideo grueso
400 gr de chipirones limpios y troceados
1 cebolla
1 pimiento verde
1,25 l de caldo de pescado
1 cucharadita de pimentón
6 o 7 cucharadas de aceite de oliva virgen
3 o 4 cucharadas de tomate frito (casero si es posible)
  • Lo primero de todo es preparar todos los ingredientes, porque luego la cocción es rápida.
  • Limpiamos bien los chipirones y los cortamos en trozos que luego se puedan comer de un bocado.
  • Troceamos la cebolla y el pimiento verde.
  • Deberemos tener el caldo de pescado listo. (Si no os queréis complicar mucho la vida se puede utilizar caldo preparado, pero yo no soy muy partidaria, con un poco de pescado de morralla y algunas verduras se hace un fumet en la olla exprés, sin problemas)
  • Colocamos la paella sobre el fuego con el aceite y cuando este caliente añadiremos la cebolla y el pimiento verde.
  • Dejamos que se cocine unos minutos y añadimos los trozos de chipirón.
  • Les damos unas vueltas a fuego vivo y añadimos los fideos. Dejaremos que los fideos se impregnen bien de los sabores y damos una vueltas para que se tuesten un poco.
  • Ya le toca el turno al pimentón y el tomate frito. Revolvemos y le añadimos el caldo de pescado. 
  • Dejaremos hervir a fuego cañero, durante unos 10 minutos o hasta que el caldo se consuma. 

  • Probamos los fideos por si no estuvieran hechos y les hiciera falta añadirles un poco más de caldo. 
  • Una vez cocidos se apagan y dejan reposar durante un par de minutos y a la mesa. Al igual que el arroz, este plato no espera. Todos listos y a comer. Acompañado de una buena ensalada, por supuesto.
Nota: si os gusta el toque del limón o la lima poned un gajo de cualquiera de estos cítricos para cada comensal.

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