Bocadillo de anchoas y rúcula

Sinceramente creo que el bocadillo es uno de los grandes inventos de la humanidad después de la rueda y la croqueta. :D

Y es que se tarda nada y menos en preparar un buen bocadillo que supla una cena con sus proteínas sus vitaminas y su calcio.

Y para muestra un botón dicen.

Este bocata es muy sabroso y una opción fenomenal para sentarse por la noche a cenar con una buena película, después de un día de trabajo y cuando vuelves sin ganas de preparar nada mejor para cenar.

Preparación: 5 minutos

Ingredientes:

1 lata de anchoas en salazón o sardinas anchoadas que también están buenísimas

un poco de queso de untar (si es a las finas hierbas mejor)

un buen puñado de rúcula 

aceite y vinagre de modena para aliñar la rúcula

Pan para hacer el bocadillo, si es de semillas genial y si no una buena baguette también es estupenda.

• Ojo a la dificultad: cortar un trozo de pan del tamaño de bocadillo que vayamos a comer.
• Abrirlo a la mitad y untar uno de los lados con un poco de queso fresco.
• Colocar sobre el queso unas cuantas anchoas o sardinas anchoadas.
• En un plato o bol aliñar la rúcula con aceite y vinagre de módena.
• Colocar una buena ración de rúcula sobre el pan y cerrarlo con cuidado.
• Poner el bocadillo sobre un plato y a comer.
• Si os gusta mucho el tomate le va muy bien unos cherrys también aliñados, hacen que se suavice un poco el salado de la anchoa y el amargo de la rúcula.

Nota: Debo confesar que este bocata me gusta mucho pero mi bocadillo preferido de anchoas es el tradicional de mi casa: anchoas con patatas fritas tipo chips.

Pensaréis que es muy salado pero en realidad no lo es y está para morirse de gusto. Probadlo y veréis como tengo razón.