Mini bundt cake de ricotta y compota de manzana

Me gusta el desayuno, es un buen momento del día para ponerse las pilas y poder comenzar la jornada en condiciones.
Me resulta difícil decidir cual es mi desayuno favorito, porque me gusta variar entre las muchas versiones: con tostadas de aceite, de tomate, de mantequilla y mermelada,  con jamón cocido y queso, galletas de todo tipo, y por supuesto bizcocho.
Además los bizcochos no solo me gusta desayunarlos, es que me encanta hacerlos. 
Preparar la masa esponjosa, luego una vez en el horno ver como crecen y el olor que dejan en toda la casa, es una delicia.

Estos que traigo hoy están hechos en un molde de mini bundt cake precioso que me regalaron por mi cumpleaños y quedan lindísimos, pero se puede hacer en cualquier otro molde que tengáis por casa.
Quedan muy esponjosos y jugosos.
Preparación: 25 minutos de horneado 10 de preparación
Ingredientes:
2 huevos L
100 gr de azúcar
200 gr de harina
10 gr de levadura química
100 gr de ricotta
100 gr de compota de manzana
25 gr de aceite de oliva virgen
1/4 cucharadita de nuez moscada
1/4 cucharadita de canela
pizca de sal
  • La preparación es como en la mayoría de este tipo de masas. 
  • Calentar el horno a 180º.
  • Batir a fondo los huevos con el azúcar y la sal, hasta que estén blanquecinos.
  • Añadir el queso ricotta, el aceite y la compota de manzana y mezclar hasta que la masa esté uniforme.
  • Tamizar la harina con la levadura, la canela y la nuez moscada y echar sobre la mezcla anterior, mezclando sin batir en exceso, para que no se estropee el trabajo de espumado que hemos hecho antes.
  • Untar el molde con mantequilla o spray desmoldante y rellenar con nuestra masa.
  • Acordaros de no llenar mas de las 2/3 partes del molde, o cuando empiece a crecer con el calor del horno se desbordarán.
  • Dejar durante 25 minutos si son moldes pequeños o 35 si es uno grande.
  • Antes de sacar pinchar con una aguja o brocheta para comprobar que está bien hecho por dentro. En caso contrario dejar unos minutos más.
  • Sacar del horno y reposar durante 5 minutos. 
  • Desmoldar y dejar enfriar sobre una rejilla.
Mira que esponjosidad tienen, tiernos y jugosos. Solo falta el café y a disfrutarlos.
Nota: Para la compota de manzana simplemente pela y trocea unas manzanas, colocalas en un cazo con el zumo de medio limón, y un palo de canela si es que te gusta su aroma y deja cocer a fuego suave hasta que la manzana esté deshecha como puré. (Ayúdale un poco con un tenedor).
Se puede aromatizar con otros especias en vez de la canela o junto a la canela, como el cardamomo, jengibre, o lo que más te guste.
Si te gusta la compota más dulce puedes añadir alguna cucharada de azúcar, a mi me parece que no lo necesita, pero eso va en gustos.
Si ves que se seca mucho y aún no está lista añade un poco de agua.

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